COPENHAGUE (KØBENHAVN)

CALLE PEATONAL MAS LARGA DE EUROPA


Esta zona compuesta por varias calles, es considerada como la calle peatonal más larga de Europa con sus casi 2 kilómetros. Ese eje enlaza, a partir de la Rådhuspladsen, con Frederiksberggade, las plazas de Nytorv y Gammeltorv, Vimmelskaftet, Amagertorv, Højbro Plads, para desembocar en Kongens Nytorv. En sus calles vemos varios edificios antiguos, pero sobretodo tiendas de todo tipo y sitios donde comer. En su recorrido nos toparemos además con artistas callejeros que anima a la masa de gente que siempre pasea por la calle en horario comercial.

La calle menos antigua de Strøget es Frederiksberggade, cuya trazado rectilíneo nace de la consecuencia del gran incendio acaecido en 1728. De entre sus edificios destacamos el número 16, el que fuera el cinema Metropol. Es uno de los ejemplos más interesantes del Art Nouveau en Dinamarca. Fue construido en 1912 por Anton Rosen, quien diseñó una fachada con amplias superficies acristaladas, separadas por una columnata decorada con motivos florales. Desde este punto nace la Larsbjørnsstræde, calle con casas de entre los siglos XVIII y XIX y epicentro de las vanguardias juveniles.

Al comienzo de la Vimmelskaftet a la izquierda nos encontramos el Jorcks Passage, un tramo de tiendas que une esta calle con la Fiolstræde. El Jorcks Passage está construido en estilo ecléctico con líneas renacentistas holandesas. En su interior destaca una plaza con una cúpula octogonal, alrededor de la cual se disponen diferentes tiendas.

Este pasaje debe su nombre a Reinholdt W. Jorck quien lo construyó para después ser alquilada a una compañía de teléfonos recién creada la KTAS. Confió el diseño a Jens Vilhelm Dahlerup y finalmente fue construido entre 1893 y 1805. Un año después, en 1896, KTAS abrió su primera central telefónica aquí. En 1910 la compañía telefónica abandonó el lugar para inaugurar su nuevo edificio en Nørregade. Más tarde, en septiembre de 1924, Radio Københavns emitió desde aquí sus primeros programas de radio.

La calle más oriental y final de Strøget es la Østergade, llena de edificaciones antiguas y tiendas elegantes (y caras). Aquí, antes de llegar al Guinness World Records Museum, en el número 24 se encuentra una bonita calle escondida: la Pistolstræde, en la que podemos ver un conjunto de varias casas antiguas de entramado de madera.

En un principio estos edificios se encontraban separados entre sí por un sistema de parcelas, pero gracias a una reestructuración se ha podido abrir esta calle peatonal entre los antiguos patios en el que colindan restaurantes, galerías de arte y tiendas. En el otro extremo de la Pistolstræde, la que desemboca a Ny Østergade, hay una pequeña zona parcialmente salvada de los derribos, en la que podemos ver casas antiguas, de entre las que destacamos una que hace esquina con entramado de madera.

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